Este estilo es ideal para las personas que buscan espacios sencillos, para los que buscan llegar a casa después de un largo día y desean relajarse, y de una decoración para un presupuesto bajo.

Es un estilo que busca la simplicidad y tranquilidad en estos tiempos de modernidad. La palabra ZEN significa “meditación”, una forma de encontrar esa calma es adaptando la filosofía de Japón (búsqueda de armonía y paz interior mediante simples y cotidianas acciones) al diseño de interiores con una serie de recursos mínimos, espacios ordenados, materiales naturales, presencia de aromas, líneas sencillas y colores neutros que ayuden con la iluminación; descartando la decoración u ornamentación excesiva.

El estilo Zen busca armonizar los espacios a través del equilibrio de color, luz y elementos, consiguiendo mediante el orden.

CARACTERÍSTICAS:

• Los colores base son el blanco y toda la gama de colores neutros como: grises, rosas claros, beige, ocres; y para darle personalidad a la decoración se tiene colores llamativos como los verdes, lilas, rojos, gama de marrones en elementos o detalles puntuales.

• El material estrella del estilo Zen, es la madera natural, cristal y las piedras (granito y arenisca), materiales que no tengan que ver con industrialización. Entre menos accesorios, arreglos, adornos se utilicen, es mucho mejor; se recomienda utilizar algún cuadro cuidando el tipo de marco y con imágenes que no tengan muchos colores.

• Los muebles que se utilizan para la decoración deben ser líneas simples y rectas, muebles bajos; evitando las cuervas, brindando comodidad sin impedir el paso. Se utilizan mobiliarios de diseño japonés, aunque sirven los mobiliarios de hoy en día sumamente sencillos.

• Otra característica es utilizar la luz natural dentro de los espacios y luminosidad indirecta sobre muebles o accesorios (focos empotrados), de este modo se crean un ambiente suave que invite al relax y la meditación.